viernes, abril 30, 2010

Mockus presentará proyecto de Región Caribe

“Región Caribe debe alcanzar su autonomía presupuestal”: Mockus

Valledupar. Abril 30/2010.- El 7 de agosto de 2011, exactamente un año después de su posesión como Presidente de la República, Antanas Mockus radicará ante el Congreso el proyecto de la Región Caribe.

“Este año será crucial para lograr construir colectivamente el Plan de Desarrollo del Caribe que definirá el rumbo y el desarrollo de los 8 departamentos que conforman la región”, anunció el candidato del Partido Verde, Antanas Mockus.
El anuncio se produjo durante el Gran debate de los candidatos presidenciales y su compromiso con la Región Caribe, realizado en la mañana del viernes en Valledupar.

Mockus dijo, además, que en sus cuatro años de gobierno trabajará para que se aumente el compromiso en la región a proteger la vida, se cuiden los recursos públicos como recursos sagrados y se supere la cultura del atajo mediante la legalidad democrática.

El candidato presidencial resaltó que “esta será una oportunidad única para construir colectivamente un proyecto que tenga en cuenta las necesidades y la vocación de la región. "La ola verde es un ejemplo de que actuar colectivamente permite alcanzar mayores logros, que si actuamos individualmente".

Así mismo, invitó a contrarrestar la cultura del atajo mediante plantación participativa e integración de propuestas nacionales y locales. Y agregó que un punto esencial para conocer la mayoría de edad de las regiones es la autonomía presupuestal, y que para ello impulsará la cultura tributaria y los aportes voluntarios que les permita a las regiones su auto-sostenimiento.

Ultima encuesta

Si las elecciones fueran mañana, ¿por quién votaría?

Mockus: 38.7%
Santos: 26,7%

De una muestra de 2.225 personas en 37 ciudades del país. La más grande realizada hasta el momento, por la Empresa Datexco, contratada por El Tiempo y La W.

lunes, abril 26, 2010

Antanas y el Caribe

Hermosa intervención de Antanas Mockus en torno al ser Caribe, a su carácter único e irrepetible, a su destino integrado. Habla de las diferencias y de la ventaja que ellas representan, y del ejemplo de la Unión Europea, y de nuevo, del valor de la vida, una de sus obsesiones.
Registro de Patricia Iriarte, el 24/04/10 en Barranquilla, Región Caribe, Colombia, con video Flip, en asocio con Galería Ars Antiqua

domingo, abril 25, 2010

De la poesía de Aurelio a la propuesta de los Verdes


La columna de William Ospina hoy me refresca gratamente el recuerdo Aurelio Arturo, poeta nariñense cuya obra conocí hace años en Bogotá y que me cautivó para siempre. Luego, buscando cosas sobre Arturo me encontré un ensayo de William Ospina, gran lector y admirador suyo, y Ospina también me cautivó con su poesía profunda. A lo largo de estos años lo he leido como poeta, como novelista, como ensayista y como columnista, y creo que, pese a todo lo que se diga sobre su carácter (que arrogante, que pretencioso, que intrigante) es uno de los colombianos más lúcidos en sus análisis sobre el país,y en las reflexiones que propone sobre nuestros problemas.

Comparto con él que Colombia se hartó del bipartidismo y luego de lo que, habiéndosele opuesto, terminó siendo peor que todos los años de frentenacionalismo y post-frentenacionalismo juntos, es decir, algo para no repetir ni emular, a menos que seamos decididamente suicidas.

La opción política que por fin ha cuajado, después de tanto esperarla, de haber creído alcanzarla con la Alianza AD-M-19 y luego con la Franja Amarilla y el Polo Democrático - que también quisieron distinguirse del binomio rojiazul escogiendo el color más visible de nuestra bandera-, esa opción hoy es Verde, y la lideran dos profesores universitarios, un tecnócrata y un ex-sindicalista. No podría ser más amplia la cobertura social y conceptual de este cuarteto que, como bien lo muestran sus obras, tiene toda una experiencia que ofrecerle al país, y unas conciencias limpias como pocas en el espectro político.

Antes de invitarlos a leer esa columna quiero invitar a los escritores e intelectuales de Barranquilla a escribir para Cantaclaro sobre este momento político y sobre la tarea que tenemos en el Caribe en materia de regionalización, tema que, como también señala Ospina, es necesario definir para no seguir atrapados por el mapa. A los caribeños, más que a nadie, nos corresponde
desbrozar ese camino, abrir, por decirlo así, la trocha que nos permitirá cerrar la brecha que mantiene rezagadas a las regiones. Ayer, en el acto del Parque Cultural del Caribe, Antanas Mockus contó que había sido compañero de Orlando Fals Borda en la Universidad Nacional, ya que ambos fueron miembros del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales, Iepri, y que en esas sesiones de reflexión y discusión en torno a los documentos que producían, Fals le había enseñado que el reordenamiento territorial era una condición para el desarrollo y la paz de Colombia, y por eso estaba seguro (palabras más, palabras menos) de que teníamos que convertirnos en lo político-administrativo, en el país de regiones que ya somos en lo social y cultural.

Quiero dar a conocer desde aquí el pensamiento de nuestros poetas, gestores culturales, investigadores, críticos, músicos, actores, bailarines, pintores, escultores, fotógrafos, estudiantes o profesionales de cualquier área (todo ello en ambos géneros) que quieran a su vez invitar a otros y otras a compartir, a disentir de, a sumar o a multiplicar esta corriente de opinión y sentimiento que parece poder sacarnos, al fin, al otro lado.

Que disfruten la columna quienes no la hayan leído, y quienes ya lo hicieron háganlo de nuevo, de repente descubren algo inspirador.

Patricia Iriarte



Donde el verde es de todos los colores

Por: William Ospina

AURELIO ARTURO ESCRIBIÓ QUE COlombia es el país “donde el verde es de todos los colores”. Esa afirmación, tan fácil de comprobar viajando por Colombia en cualquier dirección, está a punto de convertirse también en un hecho político.

Mucho tiempo se pensó que Colombia era roja o azul, y por esa ilusión fanática se vertió mucha sangre. Colombia siempre estaba negando una parte de su ser, negando sus indios, negando sus negros, negando sus selvas, negando sus ríos, negando su mestizaje, negando sus mares. Pero el último siglo nos mostró que sólo somos grandes cuando aceptamos y asumimos ser lo que somos. Contra la pretensión de ser “la Atenas suramericana” o “el Japón de Suramérica”, de ser Francia, de ser México, de ser los Estados Unidos, más bien hay que decir que en ciertos rincones somos Suiza, que junto al desierto de La Guajira los árabes de Maicao van a la mezquita y fuman sus narguiles, que en ciertos barrios de Palmira somos Japón, que por la avenida Caracas a medianoche somos México, que en la base de Palanquero desafortunadamente somos los Estados Unidos.

Cartagena creció más hermana de Santiago de Cuba y de Santo Domingo que de Pasto o de Neiva. Pasto se parece más a Quito que a Medellín. Leticia tiene más afinidades con Manaos que con Manizales. Manizales se parece más a La Paz que a Villavicencio. Popayán, Santafé de Antioquia, Mompox y Villa de Leyva se parecen más a Andalucía que a Ibagué. Esa diversidad está en todo: pertenecemos más que otros países a todo el continente. Somos el único país que está a la vez en el Caribe, en el Pacífico, en los Andes, en la Orinoquia y en la Amazonia. Eso, que nunca entendieron nuestros viejos políticos, nos obliga a tener un destino continental, a no estar encerrados en nuestro mapa.

Después de dos siglos de guerras, exclusiones, racismos, clasismos y falta de compromiso con las normas; de moral acomodaticia, de partidos que nos educaban en el odio y de políticos que nos educaban en la trampa, Colombia se cansó de bipartidismo. Ese bipartidismo irresponsable fue el que engendró en Colombia a las guerrillas y a los paramilitares, y el que nutrió a una elite ociosa e irresponsable, ignorante y despectiva, que no supo engrandecer a sus conciudadanos y que dejó el país en manos de la violencia, la corrupción, la simulación y la trampa. No sólo hemos llegado a ser el país más violento, también el más transgresor del continente y el menos solidario con sus vecinos: alguien alguna vez nos llamó el Caín de Suramérica.

De todo eso nuestro pueblo se fue hastiando, y hace ocho años eligió a Álvaro Uribe Vélez, en abierto desafío a la tradición del bipartidismo. Por desgracia Uribe, a quien le debemos algunas conquistas valiosas en el campo de la seguridad, de la cobertura en educación y salud, eternizó la idea antigua y perversa de que la solución a todos nuestros problemas es sólo militar, y después de dos períodos de gobierno nos entrega un país con una infraestructura vial similar a la que tenía en los años cincuenta, mil violencias larvadas esperando para resurgir, las relaciones con los vecinos completamente deterioradas, una alianza militar con los Estados Unidos harto onerosa para nuestra soberanía y un historial de conductas sucias desde el poder, que van desde espionaje a la oposición, crímenes con las armas del Estado contra jóvenes inermes, subsidios escandalosos para los ricos, y transgresión ostentosa del Derecho Internacional.

El viejo bipartidismo ha visto en estos defectos de la política uribista la posibilidad de volver al ataque y recuperar su antiguo dominio sobre la sociedad colombiana, pero Colombia está a punto de demostrar que la nueva generación ya se salió de las manos de ese puñado de poderes que durante siglos nos mantuvieron en la Edad Media.

Los tres alcaldes que fundaron el Partido Verde son los únicos políticos que tienen grandes realizaciones que mostrar en toda la historia reciente de Colombia. Convirtieron a Bogotá, una ciudad perdida hace quince años, en una metrópoli contemporánea que el mundo entero conoce y aprecia. Y Sergio Fajardo puede mostrarnos hoy a Medellín como una de las ciudades más admirables y pujantes del continente. No lo hicieron sólo ellos, lo están haciendo millones de personas, pero su liderazgo ha sido definitivo en ese proceso.

¿Qué tienen los otros candidatos opcionados, Santos y Sanín, por mostrar en términos de modernización de nuestra sociedad? Absolutamente nada, y Colombia lo sabe. Tienen tan poco, que en realidad ni siquiera los votos son suyos, son votos de alguien mucho más interesante y complejo, del que abrió esta brecha en el bipartidismo por la que Colombia podrá entrar al futuro: Álvaro Uribe.

El país que va a encontrar el presidente Mockus, como el país que encontró el presidente Obama, quien debe ser uno de sus principales aliados, exigirá superar terribles desafíos. No podrá hacer su tarea sin el apoyo activo de todos los ciudadanos. Y sin duda votar no será suficiente: habrá que apoyar, actuar, trabajar, pensar, soñar, defender con firmeza muchas cosas. La recompensa será grande, pero el trabajo es enorme.

Y la primera tarea, que es una tarea feliz, será elegirlo en la primera vuelta. Podemos hacerlo: el verde es de todos los colores.

jueves, abril 22, 2010

Tierra, idioma, celebración consecutiva





Como hoy se celebra en el mundo el Día de la Tierra (porque un 22 de abril de 1970 el senador ambientalista Gaylord Nelson, organizó una manifestación para exigir al gobierno de los Estados Unidos la creación de una agencia ambiental, marcha en la que participaron 2.000 universidades, 10.000 escuelas y cientos de miles de personas. La presión social logró que el gobierno creara la Environmental Protection Agency y expidiera leyes para proteger el medio ambiente), y mañana es el Día del Idioma Español, nos unimos a estas celebraciones con nuestro sencillo homenaje fotográfico y poético.


"Todo está escrito en estas tierras, en estos árboles, en estos caminos. Sólo tenemos que prestar oídos a los mamas y chamanes. Abrir el corazón a las razones del bosque y de la selva; descifrar en los surcos abiertos por el agua las leyes del respeto..."

Fragmento del poema "Sierra y Selva", de Libro de Viaje.


¿Qué tal que un día se borre todo?

Roma. Imperio de poesía


De Stanislas Valois Aragon, en http://imagineriabruja.blogspot.com/


Me pregunto si es una ley histórica que el auge material (político, militar y económico, ese momento en una nación que nos arrebata para ella el epíteto de imperio), coincida con un prodigioso florecimiento de las artes, y si, respectivamente, a un pueblo pobre le está negado este desarrollo, lo que agravaría hasta un nivel espiritual su pobreza material. Es de notar que Grecia, Roma, España e Inglaterra, por lo menos, responden a esta presunción. Así, durante los siglos del poderío heleno, se erigió la paradigmática arquitectura de cuyo esplendor nos hablan sus actuales ruinas; conservamos, en cambio, muchos de sus monumentos literarios, y un respetable haber del pensamiento de esas sus mentes brillantísimas que produjeron inmortales frutos en un momento de apogeo nacional. Lo mismo cabe afirmar de la arquitectura monumental latina, de su pensamiento y su arte en general. El Siglo de Oro español sigue este mismo "precepto", lo que hacemos extensivo a la Inglaterra de la Era Isabelina, cuya gloria literaria se prolonga hasta el alba del siglo XX; así la Francia desde los Luises, la República y el Segundo Imperio, casi hasta este siglo XXI . Hoy Grecia, tanto como España, son hermanas pobretonas en el contexto de la Comunidad Económica Europea, y el arte de ambas naciones no es de ninguna manera el primero en nuestro tiempo.

Esta consideración, en caso de ajustarse a la realidad, me llevaría a estimar que el tesoro del arte en el Egipto faraónico, de haberse conservado al menos en la medida del griego o latino (aparte de El libro de los Muertos, qué poco nos queda), suscitaría nuestra maravilla, hasta un punto positivamente mucho más alto que el generado por las gastadas pirámides. ¿Qué diré de Sumeria, China, Caldea, Asiria, Persia, Etiopía, Cartago, los imperios maya y azteca, Bizancio, el imperio Otomano...? ¿Cuánto se ha llevado la guerra, cuánto el tiempo, calanchín del olvido?

Tenemos una memoria frágil, trágicamente frágil. En Occidente, Homero es casi el Adán de la literatura; apenas unos treinta siglos de archivo, a lo sumo, y unos cinco mil años de vestigios. Hacia atrás, la oscuridad más absoluta. Algo como que de un año completo sólo guardásemos memoria del minuto anterior. Se me objetará que retenemos unas pinturas rupestres del paleolítico superior (las escenas de caza de Cantabria), o la estatuilla de Willendorf (unos 20 mil años); lo que vendría a equipararse, con mucho, a atesorar un sustantivo de Balzac respecto de su caudalosa obra.

Pareciéramos estar seguros de la conservación a futuro de lo que tenemos hoy, pero, ¿quién garantiza esto? Estamos expuestos a mortíferos ataques del sorporte electrónico. Un día podríamos despertarnos con el exterminio de toda memoria en la red, y las computadoras privadas, fuera de combate. Una catástrofe tecnológica absoluta, acompañada de la destrucción material de buena parte de la civilización a causa de unas cuantas decenas de tsunamis y terremotos. ¿Dónde quedamos? En la prehistoria, mis queridos contemporáneos, nuevamente arrojados a la prehistoria. Es lo que ha sucedido con nuestros abuelos de hace unos 15, 20 mil años hacia atrás.

Sin embargo, nos sentimos como agobiados por el peso de la historia del arte. Un alumno de lengua francesa, al hablarle de mi revista literaria en la red, me ha dicho que la encuentra "ladrilluda", con lo que quiere significar prolija. "¿Para qué este conocimiento de lo que han hecho los hombres del siglo 19, o antes?", me pregunta, y yo, alarmado y desarmado ante su suicida memoria, no he sabido qué responderle. Hoy se me ocurre comparar al estudiante con un hombre aquejado de una severa miopía, incapaz de ver más allá del alcance de la yema de su dedo del medio, siendo que arden estrellas probablemente en un número infinito sobre su cabeza: cuántos universos, cuantas visiones, cuántos sueños e intuiciones magníficos se veda el hombre que habita un sordo presente, como el cerdo que no leventa el hocico del suelo, y cuyos ojos no ha iluminado la luna.

El servicio de internet inalámbrico en prepago: un abuso contra los usuarios

Con el fin de prevenir a los usuarios de la telefonía celular y del servicio de conexión inalámbrica a internet que éstas empresas ofrecen, transcribimos la queja que radicamos el pasado 12 de abril ante la empresa Comcel por los evidentes abusos que cometen en el cobro del servicio de internet inalámbrico por el sistema pre-pago. Vean ustedes lo sucedido:


Señores

COMCEL

Barranquilla

La presente para informar de los siguientes hechos y exigir una solución satisfactoria:

1. El pasado 21 de diciembre de 2009 adquirí un plan de Internet prepago para conexión inalámbrica a través de un modem (línea 321 5054783), cancelando la suma de $101,964 y recibiendo la información básica sobre modo de operación del servicio: recargas por 1, 7, 15 y 30 días que pueden hacerse mediante tarjeta prepago, #724 o directamente en las cajas de los puntos de atención; envío de mensaje de texto indicando el tiempo solicitado y espera de mensaje de texto de confirmación, con la recomendación de hacer estos envíos con el chip del modem pero desde otro aparato celular. Así lo vine haciendo durante los siguientes tres meses.

2. El día 23 de marzo a las 3:06 pm hice una recarga por valor de $10.000, recibiendo, según el mensaje de texto de vuelta, un valor de $3.000 adicionales por promoción, para una carga total de $13.000, sin que el mensaje advirtiera que esos tres mil pesos eran utilizables sólo para servicio de voz, como tampoco lo hicieron los asesores el día que compré el servicio. Procedí entonces a hacer una recarga para 1 día, por valor de 4.640 y otra por igual valor el día 24 de marzo, para un total de $9.280 consumidos, por lo que asumí que disponía de un saldo de al menos $3.000.

3. El día 27 de marzo a las 13:06 realicé en la caja del punto de atención principal (Cra 59 con calle 70) una recarga de $82.000 para solicitar 30 días de conexión cuyo valor, según la tabla de precios proporcionada por ustedes, es de $81.200.

Con esta recarga me dispuse a conectarme y enviar desde el modem, a las 13:54 la solicitud de 30 días, con la sorpresa de que el mensaje de texto recibido me indica que no dispongo de saldo o que éste ha expirado. A las 2:06 p.m. me conecto nuevamente para intentarlo, con el mismo resultado. Me desconecté y volví a intentarlo a las 3:31 p.m. con el mismo resultado. (Hasta ahí había empleado, según el registro de conexión del modem, unos 16 minutos de conexión, los cuales pensé se cargaban al saldo de $3.000 que creía tener a mi favor desde la recarga del 23 de marzo.)

4. Procedo entonces a desconectarme y repetir la operación desde mi celular, con el misma respuesta de falta de saldo, por lo que me comunico entonces a través de *611 con un asesor, que luego de una larga espera de casi 40 minutos para “validar la información” me informa que al conectarme desde modem la primera vez para enviar el mensaje, el sistema comenzó a facturar el tiempo de conexión por demanda y que por esa razón el saldo de que dispongo es de $75.000 y no de 82.000 y por esa razón el sistema no me autoriza los 30 días. Le menciono lo del saldo de 3.000 de la promoción y es entonces cuando me informa que eso sólo sirve para minutos al aire. Al recordarle que eso no me había sido informado en ningún momento por la compañía y que desde la línea del modem no me interesa ni necesito minutos al aire puesto que para eso dispongo de otra línea celular Comcel en postpago con un plan de 1.200 minutos, lo que me recomienda es solicitar una conexión por 15 días, y que el saldo remanente lo utilice después para posteriores recargas.

5. Puesto que ya había perdido mucho tiempo en este inconveniente y que por razones de trabajo me es indispensable disponer de la conexión, procedí el día 28 de marzo a las 8:22 a.m. a enviar el mensaje de texto solicitando el paquete de 15 días, recibiendo de vuelta a las 8:23 el mensaje de texto del código 9357 que confirma que el servicio de acceso a internet ha sido activado, con vigencia hasta el 12 de abril a las 8:13 horas.

6. Hoy, 12 abril, me conecté a las 6:36 a.m. para trabajar, consciente de que tenía saldo hasta las 8:13 a.m. , pero debido a mi concentración en la lectura de unos documentos, pasó el tiempo hasta las 8:51, cuando intenté enviar un mensaje y la conexión no respondió. Entonces hice cuentas y me digo que si tenía $75.000 el 27 de marzo y el 28 utilicé $52.200, debo disponer de $22.800, por lo cual requeriría de sólo $7.000 para solicitar 7 días de servicio que valen $29.000. Sin embargo, antes de hacer esa nueva recarga decidí comunicarme por el *611 con una asesora para averiguar mi saldo y ésta me informa que no dispongo de nada, que mi saldo es igual a 0 (cero). Sorprendida, le hago el recuento de todo desde el principio para indicarle por qué debía yo tener al menos 22.000 pesos de saldo, a lo que me responde que en el día de hoy me conecté a las 8 de la mañana por x minutos y que ese tiempo el sistema lo facturó por demanda, consumiendo todo el saldo que me quedaba. Supongo que eso sucedió en los 38 minutos que transcurrieron entre las 8:13 y las 8:51, es decir, que cada minuto fue cobrado a $600, ¿Cuántos kb transmití o recibí durante ese tiempo? De cualquier manera, la información que dan sobre la tarifa por demanda no aclara si los $19.28 son por kb recibido o por kb enviado.

Al revisar todo el record de conexiones me doy cuenta de que el día 27 de marzo, cuando el sistema me facturó por demanda los 16 minutos, suponiendo que fueran los kb enviados (173.5) y no los recibidos, estos debían haber sumado 3.348 pesos y no los 7.000 que me informaron. ¿Qué pasó con los 3.652 restantes? ¿Por qué el sistema, o la plataforma, como ustedes la llaman, no envía un mensaje de advertencia avisando al usuario que ha consumido el valor de su recarga y que, como era mi caso, el tiempo restante sería cargado con valor de demanda al saldo remanente? La única respuesta posible, después de todo esta desagradable situación, es que a Comcel sólo le interesa aprovecharse al máximo del dinero del usuario para su beneficio, sin importar que estén incurriendo en actitudes francamente ilegales o, de absoluta falta de ética, si es que la letra menuda de un contrato que jamás conocemos, les autoriza para atracar así a los clientes.

Ante esta situación me permito hacer las siguientes exigencias:

1. Que la empresa se quede con los $3.000 promocionales que me asignó el día 27 de marzo con la recarga de 10.000, puesto que no necesito minutos de voz en una línea que compré exclusivamente para conectarme a internet, y que me sean reintegrados los $ 7.000 que el sistema facturó por demanda ese mismo día.

2. Que me sean reintegrados los $22.800 que se embolsillaron hoy por cuenta de una plataforma que está programada, repito, para esquilmar a los usuarios y no para prestarles un servicio de manera honesta.

3. Cancelar este acuerdo de internet inalámbrico prepago y cambiarlo por el sistema postpago a partir del mes de mayo.

Atentamente,

Patricia Iriarte Díaz Granados

(número de identificación, teléfonos, dirección)

Con copia a:

o Superintendencia de Industria y Comercio

o Confederación Colombiana de Consumidores

o http://cantaclaro.blogspot.com

viernes, abril 02, 2010

Cartas que llegan en el buzón del viento


¡Ay, mi alma!


Arturo Guerrero | Medellín |

Publicado el 31 de marzo de 2010

No hay duda de que el mundo avanza hacia la supresión del alma. El alma es lo que diferencia a un hombre del otro, y hoy reina el unanimismo. El alma siente necesidades exquisitas, y hoy la gente se atiborra de basura. El alma lee, y hoy los almacenes de muebles abolieron las bibliotecas.

Gracias al alma antiguamente los jóvenes se embarcaban en aventuras inútiles y se casaban con causas sacrificadas. Ahora nadie da un paso sin financiación, nadie tiende la mano a la víctima sin fundar antes una ONG.

Las almas se asomaban a los ojos en aquellos tiempos cuando la inocencia pensaba que los demás eran semejantes. En la carnicería corriente hay que llevar gafas oscuras para ocultar el abotagamiento de los párpados.

También las almas se dejaban ver en cuerpos gráciles, circulaban a gusto a través de coyunturas versátiles, ondeaban en cabelleras perfumadas de monte. Hoy los vientres abultados acusan solo el exceso y por eso se someten a cirugías para tomar prestadas almas falsas.

Las ilusiones se aposentaban en las almas. Muchos dedicaban media vida a labrar una utopía, sin pensar en el dinero. En la actualidad todo debe ser rápido y fácil, en especial la plata, la fama y el poder. Si para alcanzar este botín hay que matar, qué importa el remordimiento si al tercer muerto se acostumbra el dedo índice.

Los poseedores de alma son bichos raros, desadaptados en conglomerados de autómatas que adoran las pantallas. Casi siempre andan solitarios porque no hallan prójimos entre sus contemporáneos. Para convivir deben echar mano de los libros donde conversan con calma los antepasados lúcidos.

Los centros comerciales abundan en maravillas para la vanidad, mientras las librerías se cierran o se convierten en papelerías o en cafés para tertulia. El placer ha sustituido al éxtasis y el frenesí se ha impuesto sobre el arrobo.

El mundo no tiene lugar para lo inútil, lo gratuito ni lo débil. A este paso desaparecerán los degüellos de soles vespertinos, los regalos, el saludo. Ningún treintañero quiere tener hijos, porque los niños son estorbo. El futuro hiede, que viva el presente, que el ruido ahogue la música.

http://www.elcolombiano.com/BancoConocimiento/A/ay_mi_alma/ay_mi_alma.asp?CodSeccion=219

Los rumbos de Sara Harb   Por Patricia Iriarte   Me sumergí en él, salí, pasaron días. Lo retomé y volví a leer uno de los últimos c...